Una llave para la comprensión de la conciencia.
100+ happy students
Esta meditación es para driblar la mente, porque cuando sales de la mente, sales de control limitado. Las cosas bellas de la vida no son creadas por la mente sino por los sentimientos vivos, por la sexualidad, por la creatividad.
En la práctica: pasas del llanto a la risa, del "te odio" al "te amo", de la danza al silencio, y así allanas el camino para que tu cuerpo y tu corazón estén más disponibles para las bellezas de la vida. Mirando a través de nuestra mente, parece una cosa loca, sin sentido. Nuestra mente quiere poner todas las cosas en una pequeña caja, en orden, quiere controlar todos los sentimientos, todo lo que es impulso, todo lo que es natural. Dentro de nuestra mente la vida se vuelve aburrida, racional y lógica.
Es una meditación muy profunda que pasa por todas las emociones. Tanto lo que llamamos positivo como lo negativo.
El resultado es una gran limpieza emocional.
Esta meditación es para driblar la mente, porque cuando sales de la mente, sales de control limitado. Las cosas bellas de la vida no son creadas por la mente sino por los sentimientos vivos, por la sexualidad, por la creatividad.
El sentir marca la diferencia. Los opuestos atraen y crean lo nuevo. Esta fricción de oposición es lo que deja espacio para lo nuevo. Y es esta fricción la que AUM te proporciona.
Poder salir más ligero, más feliz, sintiéndote más y siendo más humano.
¡AUM es de personas vivas!
Personas que gritan, sudan, lloran, se emocionan, se preocupan el uno por el otro, se enamoran y vuelven a soñar.
Siente los opuestos dentro de ti y abre espacio a lo nuevo.
Al principio me pareció intenso, pero después entendí su magia. Pasar por tantas emociones en tan poco tiempo me dejó con una paz y una claridad que no imaginaba posibles.”
Fue como atravesar un torbellino de sentimientos y salir renovado. Nunca había experimentado una meditación tan viva y transformadora. Definitivamente quiero repetir.
“…fuimos transitando todas las emociones y la verdad es que fue increíble, porque no solo con la tristeza o más las negativas, sino en todas. Me hizo conectar con el llanto y es una parte mía que me cuesta un poco, he trabajado corazas.
Al la sensación de paz, de bienestar, de felicidad, fue muy bonita y hicimos el círculo de cierre y entonces miré a los ojos de todos mis compañeros y tenían la misma cara que yo, les brillaban los ojos y tenían una sonrisa y una sensación así muy bonita de felicidad.
Psicoterapeuta corporal Bioenergética, facilitadora de Meditaciones Activas, facilitadora de AUM
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